DESARROLLO SOSTENIBLE DE LOS SECTORES INMOBILIARIO Y CONSTRUCCIÓN RESPONSABILIDAD SOCIAL Y ESTRATEGI
- KPMG Panamá
- 26 ago 2016
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En los últimos años los sectores Inmobiliario y de la Construcción han crecido, si bien de manera desigual dependiendo del año cuya estadística revisemos. Por ejemplo, de enero a marzo de 2015 el sector Inmobiliario tuvo un crecimiento de apenas 1% respecto al mismo período en el 2014, cuando su dinamismo fue de 6.3%. En el sector de la Construcción se realizó un inventario de edificios de apartamentos y viviendas individuales al tercer trimestre de 2015 que registró un incremento de casi 7% respecto al mismo periodo de 2014.
¿Cuáles son las causas de estos diferentes índices de crecimiento en los sectores Inmobiliario y Construcción? Diversos especialistas atribuyen el hecho a que el poco crecimiento en el sector inmobiliario tuvo su origen en el aumento de los salarios, la elevación de los costos de terrenos y las nuevas regulaciones internacionales. Por otro lado, señalan, el comportamiento positivo de la actividad del sector Construcción se debe a la ejecución de grandes proyectos residenciales, comerciales y de infraestructura estatal. Estos escenarios contrarios son motivos perfectos para proponer la dinámica para definir temas sociales, económicos y ambientales que resulten en el desarrollo sostenible de ambos sectores; en especial si entre ambos existe una dependencia directa.
De acuerdo al Centro Nacional de la Competitividad, “para sostener el dinamismo del sector Construcción, es necesario implementar políticas públicas que generen confianza a los inversionistas y que éstos se sientan atraídos mediante reglas claras que se traducen en incentivos al mercado. Además, la estabilidad macroeconómica, social y fiscal serán elementos a considerar, ya que influencian las expectativas de los agentes de mercado, quienes finalmente son los que toman las decisiones de invertir, consumir o producir”.
Por esta razón, organizaciones de los sectores inmobiliario y construcción, miembros de Sumarse, participaron en octubre de 2015 en una Mesa de Trabajo para definir los temas relevantes de estos sectores, así como los retos y oportunidades para contribuir al desarrollo sostenible del país.
En esta Mesa de Trabajo, KPMG en Panamá facilitó varias sesiones con base en su metodología de “análisis de materialidad”. Este tipo de análisis permite identificar los temas principales y más relevantes que determinan el buen desempeño y competitividad de una organización, según el análisis de la relevancia para el negocio, la importancia para los grupos de interés y el impacto en la cadena de valor. De esta manera, al identificar los temas significativos, será posible tener mejor información que permita dirigir los esfuerzos hacia una responsabilidad social que sea más estratégica y aporte al desarrollo sostenible de un sector.
Como resultado de esta Mesa de Trabajo se acordó que los temas relevantes de estos sectores son: autorregulación, gestión ambiental y adaptación al cambio climático; vinculación con la comunidad, profesionalización del capital humano, y gestión de recursos externos. Este tipo de análisis permite a las empresas y al gobierno alinear las acciones de responsabilidad social con sus estrategias corporativas con el objetivo de que se instauren en la cultura organizacional, tomen en cuenta el entorno en el cual se desenvuelven y concentren los esfuerzos de sostenibilidad que refuercen la relación con sus grupos de interés.
El éxito de este tipo de esfuerzos sectoriales se está manifestando en avances clave como la aprobación de la Norma ISO 26000 por la Dirección General de Normas y Tecnología Industrial en conjunto con la Comisión Panameña de Normas Industrias y Técnicas; la presentación por el Ministerio del Comercio e Industrias del Anteproyecto de Ley sobre Responsabilidad Social, y la reciente instalación del Consejo Consultivo de Responsabilidad Social y Sostenibilidad de la Asamblea Nacional de Panamá.
Sin embargo, los logros antes mencionados son solo el inicio de la ruta mediante la cual estos sectores se desarrollarán sosteniblemente: los líderes de ambos sectores deben empezar a implementar acciones que estimulen inmediatamente la transformación hacia un país que reduzca o mitigue los impactos económicos, sociales y ambientales.
La transformación puede basarse en emular tendencias de otros países como:
Definición de estrategias verdes que se alineen con la estrategia corporativa;
Vinculación del gobierno de manera efectiva y oportuna en la aprobación y ejecución de proyectos de infraestructura que tengan objetivos económicos, sociales y ambientales ;
Generación y administración de bonos verdes para crear fondos que se utilizarán en proyectos con beneficios económicos, sociales y ambientales;
Implementación de mecanismos para disminuir las emisiones de carbono en el país y definición de métodos para reportarlas periódicamente;
Ejecución de iniciativas que promuevan el valor compartido entre empresa y grupos de interés para crear mayor fidelidad y compromiso con la marca;
Disminución de la brecha en la alianza pública-privada con el objetivo de buscar soluciones a largo plazo sin influencias ideológicas y/o políticas.
En conclusión, los sectores Inmobiliario y de la Construcción tienen una gran oportunidad de aportar al crecimiento económico del país, pero de la misma manera son una amenaza para el deterioro social y ambiental. Por consiguiente, es necesario crear equipos de especialistas que velen por los temas materiales y armar los equipos de trabajo para implementar adecuadamente las tendencias que han mostrado éxito en países con mayor madurez. De esta manera, Panamá podrá vivir los beneficios cualitativos y cuantitativos de iniciativas económicas, sociales y ambientales basadas en mejores prácticas de desarrollo sostenible.
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